jueves, 22 de diciembre de 2011

Merci Joachim!

Si es cierto eso que dicen que la suerte hay que buscarla, nosotros la merecimos desde el primer momento en el que salía con Marcos desde Vallvidrera camino de la Cerdanya, para recoger material, y quedar  sobre las 19:00h en Perpignan con Raul. Tras un seguimiento semanal exhaustivo, casi enfermizo,  de la tormenta "Joaquim", decidimos a última hora entrar a los Alpes por Briançon buscando alguna estación que quedara un poco al margen del NW con cotas bajas y bosque. Serre Chevalier era lo más parecido. Nuestra idea inicial era hacerlo por Grenoble y dormir en La Grave, pero el cierre del Col du Lautaret no nos dejó otra opción. Sobre las 02:00h llegábamos a La Riolette en Villard St. Pancrace. A las 8:00am toque de diana y primera grata sorpresa al abrir la ventana. Los primeros rayos de luz asoman tras la tormenta. Wake Up!

Briançon

El buen desayuno.


Tras el desayuno, rápido al coche y hasta Villeneuve donde nos quedamos todo el día  aprovechando un par de sillas y arrastres que nos ofrecen un playground bastante amplio, y unos cuantos face shots para el recuerdo. ¡El fin de semana no había podido empezar de mejor manera!

Village de Fréjus








Foto: Raúl Díez










Son las 16:30 cuando bajamos hacia el coche. No tardamos en parar en el primer bar que encontramos para tomar unas birras y picar algo antes de cruzar el Col du Lautaret que ya está abierto después de estar cerrado durante casi todo el día. 



Col du Lautaret




Y así, flipando con el paquete, llegamos a la Gite le Rocher donde nos damos una ducha y salimos a dar un paseo por el pueblo antes de la cena y los correspondientes chupitos de Genepi en un bar local antes de ir a dormir.



Cold outside, hot inside
Suena muy pronto el despertador en le Rocher. Poco antes de las 9:00h ya estamos delante de taquillas esperando que baje la comisión de evaluación. Mientras esperamos en el coche, la alegría se desata. Definitivamente, ¡abren!. Subimos los primeros después los forfaits de tempo. Primeras trazas sobre polvo seco en Vallons. Más tarde Chancel y el mítico couloir la Banana. Apenas debemos llegar al centenar de personas en toda la estación y no tengo palabras para describir las sensaciones que me transmite el momento. Un lugar mágico, colegas, powder.


Minutos antes del OK.






Raúl comiendo Banana.
La Meije


Hightlight
Swallow Tail
Aprovechando la niebla, paramos a comer algo en el Chalet 3200. Ambiente especial de apertura. Sopa de cebolla, vino, pastel de arándanos y Genepi. Parece que va a ser la última bajada del día, ¡seguro!. Nos despedimos de la Grave con una bajada por el el glaciar de la Girose enlazando más abajo con Chancel. Volvemos hacia Barcelona con la sensación de haber encontrado la suerte que nos está faltando esta temporada en los Pirineos. Como viene siendo normal en estos días, pocas fotos de acción, así que,  os dejo con un edit de lo vivido el fin de semana. À Bientôt!